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La técnica del DJ: la mezcla


Mezcla DJ

1. El análisis de las canciones


Aprender a escuchar

Si aspiras a ser un buen DJ, tienes que aprender a oír las canciones analizándolas y diseccionándolas por completo. Cuando oigas una canción tienes que aprender dos cosas fundamentales: la primera, distinguir cada instrumento, voz o pista claramente, y la segunda, saber el momento del tiempo en el que entran o salen. Para aprender a distinguir mejor cada instrumento usa los mandos del ecualizador. Verás como manejando los graves, agudos y medios, cada instrumento asociado a estos tonos se distingue mejor. Al principio practica con discos sencillos, con pocos instrumentos, luego vete complicando la cosa.

Tienes que distinguir los elementos básicos:

- El bombo: en la batería es el elemento más grande que se acciona con el pie a través de un pedal. Suena fuerte y grave.

- La caja: en la batería es el elemento vertical con unos resortes metálicos en la parte anversa, que proporcionan un sonido metálico.

- Hi-hat o charles: son los platillos de la batería que chocan entre sí a través de un pedal. Tiene un sonido seco y metálico.

- Otros elementos de percusión: como los platos de batería, congos, bongas, cencerros, claps o palmadas, tamboriles, etc.

- El bajo: puede ser electrónico o acústico, proporciona los sonidos graves que sirven de acompañamiento.

 - La melodía: el instrumento puede ser variado: guitarra, sintetizador, piano, órgano, saxofón, etc.

- La voz: es un sonido complejo formado por muchos armónicos. A través de la letra, con versos y estribillos, añade un valor emocional.



Saber separar la información musical

Un DJ debe aprender a ser capaz de oír dos temas a la vez, uno que se escucha en la sala, y otro a través de los auriculares o cascos, y al tiempo saber reconocer y distinguir la información musical de cada uno. Para ello, el tema principal sonará con el crosffader situado en su lado, y con el control de preescucha de la mesa de mezclas o del controlador mezclador, oiremos el tema siguiente sujetando los cascos de manera que cubran una oreja. Vamos ajustando los niveles del volumen para que ambos suenen al mismo nivel. Tenemos que aprender a separar ambos temas en nuestra mente. Hay que practicar cambiando de lado y de oído.

Para poder ser un buen DJ hay que tener buen oído y por eso hay que conservarlo. Para ello no oíremos música a gran volumen con auriculares, daremos descanso a los oídos dándolos momentos de silencio y usando tapones para los oídos para descansar o en ambientes de mucho ruido.


Cuidado del material sonoro

El material musical que uses debe conservar siempre una excepcional calidad. Si usas archivos informáticos, estos deben tener buena calidad sonora. Si usas CDs o vinilos estos además requieren un cuidado físico. En los CDs hay que tener cuidado de que no se rayen y se conserven limpios. En los discos de vinilo no rayar los surcos tomando siempre el disco entre el canto y la parte central.


2. El ajuste de los tiempos


Aprender a dar la entrada

Elige una canción y reprodúcela a volumen alto, mejor si empieza con un golpe de bombo fuerte y nítido. Aprende cuando se produce exactamente. Tienes que aprender a buscar en las canciones el momento de entrada.


Usar los faders

Tenemos dos tipos de faders: los faders que regulan el nivel de volumen de cada canal, de disposición vertical, y el crossfader, de disposición horizontal, que hace un balance del volumen de ambos canales.

Una cosa muy importante que hay que tener en cuenta es que el nivel de los faders tal como se ven no refleja el volumen comparativo de los canales, ya que los temas pueden tener distintos volúmenes originales. Si un tema está grabado a menor volumen que otro porque situemos ambos faders en la parte central de su recorrido no implica que estén sonando al mismo volumen. Por esta razón el DJ debe ser capaz de reconocer y llevar ambos temas al mismo volumen independientemente de la postura física de los faders.

La mezcla de dos temas, en cuanto a volumen de sonido, se puede hacer de tres formas:

- Subiendo el nivel de volumen del tema que entra, mientras baja el volumen del que sale, de forma que el volumen total se mantiene constante, durando la mezcla lo menos posible.

- Subiendo el nivel de volumen del tema que entra, mientras baja el volumen del que sale, de forma que el volumen total se mantiene constante, durando la mezcla cierto tiempo.

- Bajando el volumen del tema que sale, hasta igualarlo con el del tema que entra y luego subiendo este al volumen de reproducción. Hoy día ha caído en desuso.

Debes practicar una y otra vez todas estos tipos de mezcla en volumen hasta que te quede perfecto. Cuando lo domines graba una sesión de varios temas, escuchándola para ver los fallos.

Controlador mezclador DJ
Controlador mezclador DJ
Como cuadrar los tiempos

Para realizar bien la mezcla, los ritmos de las dos canciones que se mezclan deben sonar al mismo tiempo. Pueden pasar tres situaciones al mezclar las canciones:

- Las dos canciones suenan a la misma velocidad o tempo, medida en BPM (Bits por minuto), pero los ritmos no están ajustados, por ejemplo, los golpes de bombo no suenan al tiempo. No están sincronizadas.

- El golpe bombo coincide, pero luego no vuelve a coincidir. Las canciones están a distinta velocidad.

- Los ritmos y los golpes de bombo coinciden, las canciones están sincronizadas.

La manera de sincronizar los ritmos de las canciones es a través del manejo de la velocidad de los platos. La velocidad ha de ajustarse mediante el pitch y comprobar su valor. El aprendizaje de la técnica requiere paciencia y entrenamiento. Una forma de empezar a hacerlo es concentrarse en los golpes de bombo y olvidarse de todo lo demás. No tiene porque ser necesariamente el golpe de bombo, pero este se puede distinguir claramente.

La velocidad se ha ajustar de una forma fina y para eso hace falta practicar. A veces sólo se trata de un pequeño movimiento en el pitch. Se puede usar la mano para cuadrar los tiempos, frenando el giro del plato, esto se usa mucho cuando se usan platos para discos de vinilo.

Si se sincronizan y luego se vuelven a desincronizar, es que las velocidades no están bien ajustadas. Esto requiere práctica y se aprende con ella. A veces pasa que el equipo es malo y pierden la sincronía a pesar del buen trabajo del DJ, esto ocurre cuando varía el tempo, el control del pitch es deficiente o son fiables los sistemas mecánicos en platos para vinilos y CDs.

Se deben usar los auriculares y esto a veces complica la audición, sobre todo en cabinas deficientes o mucho ruido externo. Es un buen entrenamiento hacerlo en malas condiciones.

Para practicar se puede usar la misma canción en los dos platos. Otra variante es no usar los auriculares.

¿Qué ocurre si no hay contador digital de bom o este falla? Pues hay que hacerlo de forma manual y esto lo tiene que saber hacer el DJ. Se cuentan los golpes de tiempo en 15 segundos, excluyendo el que da la salida, y el resultado se multiplica por cuatro. O bien, se cuentan en 30 segundos y el resultado se multiplica por dos.


3. Mezclas y cortes


Como mezclar

La mezcla es la transición suave de un tema musical a otro, tras haber sincronizado previamente sus ritmos. Consta de tres fases: 1) sincronización de tiempos, 2) introducción progresiva del segundo tema, y 3) desvanecimiento progresivo del primer tema.

Para mezclar con el crossfader, primero se situara en el lado del tema que esté sonando, después se sincronizan los ritmos, se desplaza el crossfader a la zona media de forma que suenen los dos temas a la vez, y finalmente se mueve lentamente el crossfader hacia el lado del tema que entra.

Para mezclar con los controles de canal o faders, el crossfader ha de estar situado en el centro, y el fader del tema que está sonando a máximo volumen, se sincronizan los tiempos, se va subiendo el volumen del tema entrante hasta el máximo, y finalmente se va disminnuyendo hasta desaparecer el volumen del tema que sale.

Hay que procurar evitar las mezclas en las partes de las canciones más melódicas y sí en las rítimicas, siendo ideales las que sólo se oyen baterías. También hay que saber usar el ecualizador, sobre todo en las canciones en las que son más pobres los graves. Hace buen efecto mezclar rápido las canciones con tempos rápidos y mezclar lentamente las canciones repetitivas y lentas. Si existe un crescendo en volumen en la canción que entra puede dar mucho juego en la entrada. Si dos temas se acoplan perfectamente, no hay que tener prisa en hacer la transición porque está sonando muy bien.


Sincronizando frases

El DJ debe saber contar tiempos, frases y compases. Acostúmbrate, cada vez que escuches música o bailes, en contar los tiempos: 1, 2, 3, 4, 1, 2, 3, 4... Cuatro tiempos forman un compás. Cada cierto número de compases ocurre "algo" en la canción, la entrada de un instrumento o una determinada percusión, ya sea un sonido de sintetizador, platos, efectos, etc.

A la hora de mezclar dos temas, las frases no se pueden romper, ni desajustar. Esto no es teoría, esto es instintivo. Hay músicos que no saben nada de teoría musical y hacen canciones con compases. Es lógico, si no, no sonaría bien, no sería música, sería ruido, desarmonía...


Como cortar

Un corte, caída o drop mix es una transición brusca entre dos canciones sin perder el ritmo. Se suele utilizar en hip hop y garaje. La técnica no es sencilla y es importante grabar el aprendizaje para oír como queda, ya que la transición es muy rápida para apreciar su técnica en el momento que se hace. Funciona con música poco densa, con pocos instrumentos, y una percusión muy marcada.

El corte no es como la mezcla, ha de ser planificado. Se suele hacer con percusión y percusión, percusión y bajo, o percusión y bajo con melodía.

Aunque aprender la técnica del corte en una mezcla requiere trabajo, su teoría es sencilla: sincronizar las canciones, esperar el momento adecuado, y desplazar el crossfader de golpe a la canción entrante.

Si se te ha pasado el momento, espera el siguiente compás. Insistimos, es fundamental grabar los ensayos, además de para ver como lo hacemos, para saber si estamos cortando en el momento apropiado.

El corte también se puede hacer por inserción directa, sin mezcla, se oye un tema y se repente se pasa al siguiente. Estás escuchando el segundo tema para saber cuando pasar al mismo. No tienen porque estar sincronizados, pero hay que respetar, como siempre, el ritmo y los compases.

También se puede realizar un corte reversible, la transición es brusca entre una canción primera y la segunda, pero al poco vuelve la primera, y luego volvemos a la segunda, y así. Esta técnica es ideal para provocar al público y animar la pista de baile. Es fundamental que ambos temas están totalmente sincronizados, sino puede ser un desastre.

Se pueden añadir efectos en los cortes, como scratchs, efectos en forma de explosiones, etc.


Paradas y spinbacks

Una bajada progresiva de un tema por volumen o por velocidad puede ser una manera muy interesante de finalizar una sesión o dar entrada a un tema impactante. Si a ello además se une un desvanecimiento de las luces puede llegar a ser espectacular. La entrada del nueva disco puede ser de golpe o de la misma manera subiendo el volumen y/o la velocidad. Esta técnica hay que practicarla bastante porque puede parecer espectacular o puede parecer una chapuza.


4. Sincronización de los ritmos y armonía


Como ubicar

La mezcla perfecta implicaría el final de un tema unido al principio del otro, pero esto es difíciil de llevar a cabo en la práctica. Todos los temas tienen un intro y un final, y es en estos donde haremos la mezcla. Si los ritmos son muy parecidos se pueden solapar sin problemas el final del tema que sale con el intro del siguiente, pero si no lo son y se quiere dar una especie de intermedio, se puede incluso emplear la parte percusiva de otro tema puente.

La transición entre canciones ha de ser de tal manera que no parezca que hay transición. Es decir, que sea indistinguible el inicio y el final.

En los discos muy percusivos, la mezcla corta es más explosiva, para animar la pista de baile, mientras en los melódicos y muy repetitivos puede ser más larga.

Cuando un tema hace un break o un falso final, en la que decae el volumen y la música, este puede ser un buen punto para hacer la unión con el que viene.

Hay que evitar que la energía musical se venga abajo. Esto no quiere decir que siempre haya percusión o "marcha", sino saber jugar con todo esto, motivar y provocar al público, jugando a lo que no se espera.

Hay que conocer muy bien los temas, saber donde encontrar los puntos de mezcla y sobre todo practicar con todo esto. Conceptos clave en este sentido son la lógica y la armonía musical y la memoria musical, si todo esto lo tenemos claro, partimos de una buena base, y estos muy buenos cimientos los pulimos con la práctica, primero escuchando detenidamente los temas, y luego practicando con sus mezclas.


Como sincronizar los ritmos

La música moderna de baile (techno, funk, hip hop, etc.) está en el compás 4/4, cuatro tiempos por compás. Esto se comprueba fácilmente al pinchar un tema y contar mentalmente 1, 2, 3, 4, 1, 2, 3, 4, 1, 2, 3, 4...

Analizando la percusión, si en un papel haces una cuadrícula con el 1, 2, 3, 4, 1, 2, 3, 4, 1, 2, 3, 4... te darás cuenta como en cada tiempo suena un elemento de percusión distinto: bombo, platillos, caja, hi hat, etc. Si dos temas tienen un patrón de percusión similar eso quiere decir que van a mezclar bien.

Un tiempo es una parte del compás en el que suena algo y un contratiempo es el silencio entre tiempos. Es algo así como Y 1 y 2 y 3 y 4, y 1 y 2 y 3 y 4...

La síncopa es tocar una nota algo adelantada o algo atrasada. Por ejemplo, unas palmas en un contratiempo.

El silencio o pausa es un tiempo sin sonido. Si en un compás, el primer tiempo es un silencio, lo que has considerado el primer tiempo, es en realidad el segundo.

Hay ritmos típicos. En el house, cada tiempo lleva un golpe de bombo; en el funk y el hip hop, el bombo suena en el primer tiempo; en el indie y en la música de baile de los años sesenta, una caja sonaba en cada tiempo.

Hay varias causas de que los ritmos no mezclen bien: la existencia de síncopas, mucha densidad rítmica, etc.

El compás 4/4 es el más normal, pero pueden emplearse otros. La samba, la marcha y la polca usan el compás 2/4. Ciertos ritmos afrocubanos usan el compás 6/8, aunque la salsa, la bossa nova y el mambo usan el 4/4. El 3/4 es el compás típico del vals. Y ciertos temas y bandas pueden usar otro tipo de compases.


Como evitar la falta de armonía

Hemos hablado de volumen y de ritmo, pero no hemos hablado de tono, de tonalidad. Ahora es el momento de hacerlo.

Cuando suenan varias notas juntas, como en un acorde, el conjunto no siempre suena bien. Si son de la misma tonalidad, suena armonioso, si no, puede sonar desde mal hasta horrible.

Si a la hora de mezclar dos canciones, el ritmo está buen ajustado, pero suena mal, es que hay un problema de falta de armonía en esa mezcla.

Las reglas de la armonía se estudian en la teoría general de la música, pero no hace falta estudiar teoría para saber que algo está sonando mal, esto, como todo, también requiere entrenamiento.

¿Qué debemos hacer en el este caso? Lo mejor es no mezclarlas, pero si estás decidido a hacerlo tienes tres opciones: la primera, es hacer un corte, en vez de mezcla; la segunda, mezclarlas en una parte de la canción en la que sólo hay percusión; y la tercera, es usar la ecualización, para tapar los elementos que suenan mal.

No obstante, hay que tener en cuenta algunas cosas. La percusión suele casar bien, pero hay ciertos elementos que a veces no lo hacen, ten cuidado con esto. En un mismo tema puede cambiar la tonalidad, no es lo normal pero puede suceder. La tonalidad cambia con velocidad, por eso al bajar de velocidad nos suena grave y al subirla agudo, y aunque la diferencia sea pequeña, puede variar lo suficiente para cambiar la tonalidad.


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